Por Ana Dora
En los últimos días se ha mencionado en diversos medios de comunicación el juicio que se lleva en el Centro de Justicia Penal contra Cayeyo.
Eduardo “N”, conocido como Cayeyo presuntamente ocasionó la muerte de Eugenio “N” al dispararle a quemarropa en su casa del Campestre, involucrando al Fiscal General porque la hija del funcionario era novia del ahora occiso.
Los probables hechos
La noche del 4 de mayo de 2017, Eugenio, Juan, Fernando, Daniel y Cayeyo celebraban el cumpleaños de uno de ellos en el restaurante Hank´s ubicado en el barrio de Tequis, al finalizar se trasladaron al Club Campestre de Golf a la casa de Cayeyo, ahí fue donde supuestamente por la madrugada sucedieron los hechos. De acuerdo al testimonio de amigos del occiso, Cayeyo se comportaba violento y agresivo, al grado de lanzar un vaso de vidrio al suelo para después con gritos y groserías decirles que se fueran, quedándose solos Eugenio y Cayeyo.
La versión de Fiscalía sostiene que Cayeyo disparó a quemarropa contra Eugenio, mientras que la Defensa argumenta que fue una riña.
El Fiscal
Este juicio es tan controversial por el hecho de que Eugenio el joven que falleció, estaba comprometido con la hija del Federico Garza Herrera, Fiscal General del Estado. Quien supuestamente tuvo conocimiento del homicidio por el propio Cayeyo, el cual le avisó minutos después de los hechos, siendo además vecinos del fraccionamiento. El conflicto incide en determinar si Federico Garza ingresó o no al domicilio, actúo o no en el momento, y si lo hizo con qué facultades, como Fiscal o como pariente del occiso y esclarecer cuándo tomó la decisión de solicitar la presencia del Comisario, Guadalupe Castillo Celestino.
El hecho ha marcado a la familia del Fiscal, los cuestionamientos de la prensa, los rumores que circulan entre la socialité y el morbo en general, incomodan a su esposa, una mujer educada y reservada y a su hija quien perdió a su prometido.
Eugenio
Uno de los solteros más codiciados por las niñas de la sociedad potosina, era muy atractivo, con una sonrisa que enamoraba a cualquiera. Se le puede recordar como un joven educado y respetuoso con bases sólidas inculcadas por sus abuelos, era hijo y hermano. Apasionado al motocross el cual practicaba con sus amigos. Su hermano Salvador “N”, lo representa en el juicio, mientras que su tío, un hombre adulto mayor, no ha dejado de estar presente durante las extenuantes audiencias, siempre con un trato amable para todos.
Cayeyo
Eduardo “N” conocido como Cayeyo Jr. forma parte de las familias más acaudaladas en San Luis, su abuelo fue propietario de la empresa Coronado. Es hijo de Eduardo y Patricia, quienes llevan años separados. Su madre vivió en Estados Unidos pero regresó hace un par de meses, mientras que su padre, conocido en el mundo taurino como Cayeyo, y de acuerdo a diversos testimonios, un hombre difícil y de temperamento explosivo. El presunto culpable, creció solo viviendo en diversos lugares del país, de manera extraoficial se menciona que agredió a su tío, propinándole una golpiza que lo llevó a urgencias, y todo por la disputa de propiedades y caballerizas. Durante el juicio Cayeyo, está rodeado de casi diez abogados, y llama la atención que hasta el momento no hemos observado algún familiar o amigo que lo acompañe.
Este juicio, además de estar bajo el escrutinio público por las familias involucradas, podría hacer visible el funcionamiento o no del Sistema de Justicia, así como todo el aparato gubernamental que lo integra y las deficiencias que hay dentro de la Fiscalía para armar una carpeta sólida de investigación.
Porque de existir deficiencias en un caso «especial» por ser de un pariente del Fiscal, se podrían cuestionar las miles de investigaciones que la Policía Ministerial ha realizado y que han quedado en impunidad.
*Dibujo a lápiz por Rod Lozano
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