El Comité de Naciones Unidas para la Eliminación de la Discriminación Racial ha emitido un informe denunciando abusos perpetrados en puntos internos de control migratorio de México. La denuncia incluye casos de violaciones de derechos humanos contra indígenas, afrodescendientes y otras minorías étnicas, que han sido objeto de torturas, uso excesivo de la fuerza y deportaciones ilegales.
Según el informe, estas violaciones han ocurrido en centros operados por agentes del Instituto Nacional de Migración y miembros de la Guardia Nacional. Se destaca que las personas afectadas por estos abusos son afrodescendientes, personas negras, morenas o indígenas, incluyendo ciudadanos mexicanos.
El comité de la ONU ha instado a las autoridades mexicanas a investigar y sancionar estos actos, así como a prohibir mediante legislación las prácticas de perfilamiento racial, que con frecuencia resultan en abusos racistas y malos tratos por parte de las fuerzas del orden.
Además, el informe señala la proliferación de mensajes de discriminación y odio racial contra estas comunidades, incluso por parte de figuras públicas. Se destaca también la discriminación estructural que enfrentan los pueblos indígenas en México, evidenciada por altos índices de analfabetismo, bajo rendimiento escolar y dificultades de acceso al mercado laboral.
El Comité expresó preocupación por el impacto negativo de ciertos proyectos de desarrollo e inversión, como el Tren Maya, en los territorios y recursos de las comunidades indígenas. Se denuncia la militarización de las tareas de construcción, que ha generado abusos y violencia contra las personas indígenas contratadas para participar en la obra.
Finalmente, el informe destaca algunos avances positivos, como la adopción de la ley federal de protección del patrimonio cultural de indígenas y afromexicanos, así como la creación del Consejo Nacional de los Pueblos Indígenas como mecanismo de participación de este colectivo en México.
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