Mientras que el municipio se encuentra hundido en una ola de violencia e inseguridad, los elementos de la Policía Municipal de Villa de Reyes se enfrascan en pleitos y discusiones con ciudadanos en donde, con lujo de violencia y con toda la prepotencia que les es posible, intimida, agreden y amenazan a ciudadanos cuyo único delito es cuestionar el pésimo gobierno de la alcaldesa Erika Briones.
En un breve video difundido en redes sociales, se puede ver cómo los elementos de la corporación municipal amenazan con pistola en mano a un grupo de ciudadanos. Explican que el enfrentamiento se dio hace algunos días a las afueras de un domicilio particular a donde llegaron varios agentes a bordo de varias patrullas y sin razón aparente comenzaron a agredir a los presentes asegurando que se los llevarían presos.
Ante la resistencia puesta por los civiles, dado que los elementos no contaban con ningún mandato judicial , además de que excedían sus funciones al no estar facultados para proceder ante situaciones de este tipo, uno de los agentes comenzó a agredir físicamente a un hombre mismo que intentó defenderse por lo que el agente empuñó su arma y amenazó con dispararle.
Los ciudadanos ahí presentes tuvieron que intervenir para controlar la situación ya que, aseguran, el elemento estaba dispuesto a disparar mientras que sus compañeros seguían intimidando a varios de los ahí reunidos sin importarles que entre ellos hubiera niños y adultos mayores a quienes, incluso, también golpearon.
Ante este tipo de hechos, las víctimas de la agresión condenan que la Policía Municipal se preste a este tipo de situaciones cuando el municipio está hundido en violencia e inseguridad pues, lejos de procurar defender y apoyar a la ciudadanía, los propios agentes policiacos son quienes los agreden y vulneran de cuantas formas les es posible.
Erika Briones Pérez, la presidenta municipal, sigue desaparecida desde que hace ya varias semanas anunciara su supuesto positivo a la prueba de covid-19, desde entonces, no se le ha visto por Villa de Reyes aunque, afirman diversas versiones, donde sí se le ve es en lujosos restaurantes y tiendas departamentales realizando cuantiosas compras mientras que los habitantes del municipio sufren por la violencia, el coronavirus y los abusos de la policía.
