Santa Clos tiene listos los regalos de Navidad, pero ante tanta petición política abrió una ventanilla de emergencia.
La primera cartita emergente que le llegó fue del niño Ricardito que le pidió con urgencia que el gobierno de papá AMLO le envíe las participaciones de diciembre porque se acaba el mes y el año y nada de nada.
Pero apenas abrió la carta Santa Clos y se dio cuenta de que había más peticiones, Ricardito le pidió que el 2024 transcurra en paz porque suficiente tiene con los pleitos entre los militantes de MORENA y el partido Verde.
Santa dijo que eso lo va a pensar porque son muy desobedientes esas tropas.
El niño Gabino quiere ser Senador, pero es tanto el alboroto entre los aspirantes que un día se duerme con la candidatura en la mano, pero amanece con que ya lo degradaron a una diputación. Gaby es un chico rebelde pero disciplinado así que Santa le manda decir que aguante vara, que él ya sabe quién es el gran elector y algo bueno le tiene reservado.
El niño Nachito andaba muy triste porque su amiguito Ricardito lo traía un poquito frío por eso le pidió a Santa que le devuelva a su amiguito buena onda. Eso nada mas y será feliz por siempre. Santa puso una palomita que quiere decir: Deseo concedido.
De los rumbos del Ayuntamiento Santa recibió la cartita del niño Enrique que le pidió mucha inteligencia para lidiar con el PRIAN porque ven la tempestad y no se hincan.
El niño Enriquito le pidió a Santa que le cuide las espaldas porque en esto tiempos hay mucho traidor y simulador. Como es un niño bueno y disciplinado, Santa ha prometido cuidarlo y protegerlo.
Por el cuadrante del PAN la niña Veroniquita anda como adolescente, ya pasará le dice Santa. Todas las barbies que pida, le llegarán a su nuevo hogar.
Un tenue, muy tenue luz tricolor emanaba de una de las cartas, Santa la abrió y vio que era de la niña Sarita. Las caras que hizo Santa son indescriptibles, ningún emoji le haría justicia. La niña Sarita quiere todo, destruir a sus enemigos, aplastar a sus críticos, Tener dinero de a montones y un asiento en el Senado. Es mucho, dijo Santa y dejó a un lado la cartita.
Al niño Valladares, que todo lo tiene en abundancia, Santa dijo que le traerá un frasquito con aceite mágico para que decida con mucha luz su futuro político. Por cierto, Santa dice que su compadre Checo Pérez, le debe el bolo del bautizo de Carlitos III.
En cuanto a las peticiones del niño Lupe, Santa pide que se porte bien, que aproveche al máximo su potencial y que no desperdicie su pólvora en infiernitos. El hombre de la Navidad le hará llegar un consejo: Puede mas una gota de miel, que una de hiel porque las travesuras son malas consejeras.
La niña Sonia quiere comerse el mundo a puños, pero cuando los nuevos políticos van, ella ya fue y vino dos veces. Ahora como aspirante a la alcaldía, sus bonos políticos subieron, pero Santa le advierte que no se deje envolver por algunos parasitos que ya se dejaron ver con ella en el partido verde.
Y ahí está Santa leyendo cartitas y mas cartitas de políticos aspiracionistas.
Muchos son los llamados y pocos los elegidos, no se dejen de preocupar, dice el querido Santa.
Feliz Navidad.