Las moscas pueden llegar a parecer inofensivas, de ahí la famosa expresión «no mata ni a una mosca», a pesar de esta creencia popular se les tiene un particular recelo y naturalmente son asociadas con la suciedad.
Sin embargo, hasta hace poco la OMS emitió una alerta sanitaria, en donde se exponía que una especie en particular de esta familia podría infectarte de «Leishmaniasis» una enfermedad degenerativa que puede llegar a ser mortal en los seres humanos.
El ejemplar es conocido como «mosca de arena», la cual es mucho más pequeña que un mosquito, teniendo solo un cuarto de su tamaño, sin embargo, cuando la mosca adquiere esta infección se convierte un emisario mortal para los seres humanos.
Hasta hace poco tiempo se creía que esta infección era exclusiva de los viajeros, quienes visitaban lugares exóticos y se topaban con la mala suerte de encontrarse con una mosca arenera infectada, sin embargo, la Oficina de Control de Plagas y Especies de Estados Unidos, emitió un comunicado en donde se exponía que los casos más recientes de este padecimiento eran de personas que no cumplian el perfil de viajero, lo que levantó las alarmas en la comunidad médica.
Para entender la gravedad de esta noticia hay que explorar en qué consiste la Leishmanisis. Esta infección ocurre cuando la especie se infecta, posteriormente, la mosca de arena en búsqueda de sangre para lograr el desarrollo de sus huevos, pica a los humanos transfiriendo la enfermedad, la cual puede variar en tres tipos.
Cutánea: La cual afecta meramente a los tejidos corporales cercanos de la zona en la que se produjo el piquete, provocando llagas y lesiones similares a un cráter en la piel, generalmente el parásito inutiliza la terminales nerviosas de la zona afectada, por lo que no se siente dolor, aunque la cicatrización de estas provoca malformaciones y deformaciones en la piel, más aún si el piquete ocurre en la zona del rostro.
Visceral: Está es la más grave, ya que ataca directamente los órganos de la piel, como lo pueden ser el bazo, hígado o médula ósea, de no ser tratada a tiempo puede ocasionar la muerte del huésped.
Monocutánea: Esta variante afecta el funcionamiento de las funciones básicas del cuerpo humano, inhabilitando la vías respiratorias, nariz y garganta.
Hay personas que son asintomáticas, las cuales pueden ser infectadas pero no mostrarán ninguna señal de contagio, sin embargo, la mayor parte de la población es sintomática, reaccionando por completo a los embates de la infección.
Los médicos de Texas ya se encuentran trabajando en el registro y tratamiento de este padecimiento, con el fin de actualizar a la población y mantenerla alerta contra el contagio y prevención de esta rara infección.
Seguiremos informando.
