El sueño de Yolanda Josefina Cepeda Echavarría de convertirse en la primera gobernadora de San Luis Potosí está a punto de convertirse en pesadilla, pues según los informes finales de la revisión de las cuentas públicas 2018 por parte de la Auditoría Superior de la Federación, la priista habría desviado un total de 72 millones 437 mil 400 pesos con 71 centavos, lo que podría tener sanciones de cárcel o inhabilitación en el servicio público.
Según un dictamen final de la Auditoría Superior de la Federación con fecha del pasado 3 de septiembre, la administración 2015-2018, habría desviado los más de 72 millones de pesos destinados para infraestructura social a través del Ramo 33 en el 2018 para solventar el desfalco del 2017.
La priista Yolis, como es conocida entre sus nuevas amigas de la capital, habría transferido una buena parte de los más de 72 millones de pesos para solventar el desfalco en el Ramo 28 correspondiente al 2017, pero el restante lo habría gastado en gasolina, salarios, publicidad, posicionamiento en redes sociales y la campaña electoral de 2018 donde buscó la reelección.
Según el expediente DARFTC1/155/2019, la Auditoría Superior de la Federación concluyó que la actual secretaria general del PRI en San Luis potosí, Yolanda Cepeda desvió los más de 72 millones de pesos, por lo que inicia ahora un proceso que la puede llevar a la cárcel o la inhabilitación del servicio público.
A pesar de las visibles anomalías en las cuentas públicas de Aquismón, en San Luis Potosí las dependencias potosinas no han encontrado elementos pasa sancionar a Yolanda Cepeda, pero por si las dudas, el PRI la nombró secretaria general del partido con la intención de librarla de posibles sanciones por los malos manejos con el dinero del pueblo.
A pesar de que Yolanda Cepeda suele tener una actividad considerable en redes sociales, parece que se quedó muda pues no se ha pronunciado sobre el desfalco millonario que encontró la ASF.
