Casi a finales de Febrero la candidata a la presidencia de México, Xóchitl Gálvez, estuvo en visita privada en San Luis Potosí.
La candidata de la coalición “Fuerza y Corazón por México” vino a nadar con tiburones, en terreno de los tiburones y a pedir apoyo para financiar la campaña en territorio del Potosí.
Xóchitl se sintió cómoda entre sus anfirtiones, entre ellos el empresario minero, José Cerrillo, el ex gobernador Marcelo de los Santos y obviamente el dueño del Club de Golf La Loma, Carlos López Medina.
Eran unas 12 personas, todos acostumbrados a nadar en las aguas profundas de la política, pero nunca tan degradados como en la era de la cuatroté y del Gallardato, como se le conoce a la administración de Ricardo Gallardo Cardona.
Los tiburones saben cual es su área de oportunidad y han permanecido estoicos ante los embates de la cuatroté y sus fricciones tanto como el gobernador Gallardo como con el presidente, Enrique Galindo a quien le regatean capacidad política por su formación de policía.
Xóchitl fiel a su estilo fue directa al grano. Explicó su propuesta de país, su estrategia electoral y pidió con humildad el apoyo económico de los tiburones del Potosí.
Explicó con claridad su plan y sus posibilidades reales de ganar la elección del dos de junio. Lo que dijo tuvo tal impacto que los oligarcas del pueblo, lastimados como la mayoría de los empresarios por la cuatroté prometieron su cooperación.
Todos los gobiernos enfrentan el pago de factura al final de su gestión, anteriormente se decía que antes de irse deberían curar heridos y enterrar muertos, pero el lopezobradorismo solo ha tenido ojos y manos para destruir lo que sea, como se llame, que se oponga a su desmedida ambición de poder y dinero.
López Obrador va a tener que pagar facturas políticas, por omisiones, ineptitudes, abusos de poder, el involucramiento de sus hijos y hermanos en negocios multimillonarios con recursos del gobierno.
López Obrador ha demostrado que los escrúpulos no son lo suyo a la hora de imponer sus deseos y en ese andar se olvidó de construir un sucesor realmente fuerte y es hora que Xóchitl crece mientras su candidata, Claudia Sheinbaum no acaba de cuajar como su sustituta.
En la política mexicana como en las monarquías, muerto el rey, viva el rey y la historia reciente lo retrata muy bien: Cada presidente procede a encarcelar a ex funcionarios para romper con sus antecesores. Lo hizo Ernesto Zedillo que manda a prisión al hermano de Carlos Salinas de Gortari y de ahí para adelante, el modelo se replica aunque los panistas, Vicente Fox y Felipe Calderón dieron sus manotazos con otro estilo.
El caso es que Xóchitl está haciendo aliados para su causa mientras que Claudia está empeñada en dinamitar a los suyos. La campaña tiene mucho por delante y aún estamos por ver muchas cosas que quedarán inscritas en la historia de nuestra democracia.
P.D.1.- Enrique Galindo Ceballos está convertido en el rehén favorito del PRIAN. Al cuarto para las doce los partidos se amenazan. El PRI advierte que va a romper la coalición porque el PAN impuso candidatos de muy mala reputación en Xilitla y Valles y rompió con ello acuerdos nacionales y el PAN advierte que pueden sacrificar a Enrique Galindo que busca la reelección en la presidencia municipal. Aquí tiene ya la primera chamba el delegado de la candidata a la presidencial, Xóchitl Gálvez, Fernando Chávez Mendez.
P.D.2.- Pero si eso es en el PAN, en el Verde-Morena-PT no cantan mal las rancheras, entre los verdes hay sentimientos encontrados por la postulación de Sonia Mendoza que además tiene que conciliar con MORENA. Mendoza está entre dos fuegos y tres aguas, pero sigue siendo lo mas competitivo que tiene el gallardismo para enfrentar a Enrique Galindo. Lo mejor está por verse.
P.D.3.- Tamazunchale representa desde ya, un foco rojo electoral. La polarización entre los grupos de los hombres que contenderán por la presidencia municipal ya se ve que están dispuestos a todo. No será la primera vez que la sangre llega al río en ese municipio.
P.D.4.- Palomita para el presidente municipal interino de Matehuala, Franco Coronado que logró convertirse en el alcalde mejor evaluado de San Luis Potosí luego de meter orden en un municipio que recibió realmente convulsionado. Bien por el joven político panista.