Nuevamente, el alcalde de la capital, Xavier Nava, demostró ser candil de la calle y oscuridad de San Luis. En esta ocasión, decidió huir de la inseguridad y violencia que se vive en la ciudad que el gobierna para participar en la Marcha por la Paz, en Cuernavaca, Morelos. Esta caravana fue convocada por la familia LeBaron y el activista Javier Sicilia para demandar una solución al crimen en México al gobierno federal.
Irónicamente, el alcalde se unió a un movimiento que pide por la paz en el país cuando el deja una ciudad bañada en sangre. Los homicidios están a la orden del día, como el cruel asesinato de Aurelio Gancedo, así como los robos de autos y a restaurantes y negocios; así como los abusos de poder que ejercen sus policías y funcionarios contra los ciudadanos.
También deja los conflictos con los comuneros de San Juan de Guadalupe quienes acudieron a Palacio Municipal para exigir dialogo con él; sin embargo, este no se pudo llevar a cabo porque el alcalde no estaba.
No es algo nuevo que Xavier Nava pretenda ser protagonista de movimientos nacionales, como lo hizo hace unos meses en la marcha de alcaldes a Palacio Nacional. En esa ocasión, se le olvidó los problemas luego de la violencia en el Alfonso Lastras que sus oficiales no pudieron controlar y fue a destrozar la puerta del recinto presidencial como vil pandillero.
Sobre su participación en la Marcha por la Paz, poco se puede decir. El alcalde apenas si se ensució los zapatos en el arranque al que asistió con la esperanza de que alguien le hiciera caso; sin embargo, los micrófonos se dirigían a Sicilia y a la familia LeBaron. A Xavier no le quedó más que ver de lejos como todos lo ignoraban.
Dicha marcha partió esta mañana de Cuernavaca en dirección a la Ciudad de México; de acuerdo con el itinerario, llegarán el sábado a paseo de la Reforma en la capital del país. Como es de esperarse, el alcalde sólo se apareció al inicio para intentar salir en la foto, la cual muchos prefirieron cortar.
