Verónica Sarauz, la viuda del candidato presidencial ecuatoriano Fernando Villavicencio, ha hecho fuertes acusaciones contra el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), alegando negligencia política en relación con el asesinato de su esposo, un evento que ha sacudido a Ecuador y que tiene ramificaciones en el ámbito internacional.
En una entrevista concedida a la revista Proceso, Sarauz detalló que hay varios sospechosos en el asesinato de Villavicencio, pero que su esposo tenía al menos tres enemigos principales. Uno de ellos sería el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación, dos grupos de narcotraficantes mexicanos, a los que Villavicencio había denunciado pocos días antes del atentado.
El político ecuatoriano había hecho pública una amenaza de muerte recibida, supuestamente de Adolfo Macías Villamar, líder de la banda criminal Los Choneros y aparente capo del Cártel de Sinaloa. Además, Villavicencio había advertido sobre la influencia del narcotráfico en la política ecuatoriana y había citado el saludo del presidente López Obrador a la madre de Joaquín «El Chapo» Guzmán como ejemplo de esta problemática.
Sarauz insinuó que la confrontación de su esposo con los cárteles de la droga fue la causa de su asesinato y exigió que se investigue la posible implicación del Cártel de Sinaloa en este caso. Criticó la «calidad moral» de López Obrador al afirmar que no hay pruebas de la presunta participación del cártel en el asesinato.
La viuda de Villavicencio también apuntó a la negligencia política en el tema del narcotráfico en México y Colombia. Afirmó que los gobiernos de estos países no han controlado eficazmente la expansión de los cárteles y han permitido que estos operen y recluten jóvenes en otras naciones, incluyendo Ecuador.
Las acusaciones de Sarauz han generado un nuevo foco de atención en la lucha contra el narcotráfico en la región y plantean interrogantes sobre las acciones de los gobiernos para abordar este problema que afecta a múltiples países.