Una de las fiestas que más llama la atención y que gusta de chicos y grandes es el Viernes de la Samaritana, la cual se lleva a cabo el Cuarto Viernes de Cuaresma en las calles del centro histórico de la ciudad de Oaxaca de Juárez, al compartir agua fresca o nieves a los visitantes que caminan para admirar los coloridos puestos en los que sobresalen los adornos elaborados a base de papel blanco y morado, así como palmas y flores de bugambilia. Esta herencia generacional hace alusión al pasaje bíblico que relata el encuentro de Jesús de Nazaret con una mujer Samaritana en el pozo de Jacob en la ciudad de Siquem.
La degustación comienza oficialmente a las 12:00 horas en la Parroquia de la Preciosa Sangre de Cristo y continúa en los veintisiete templos de la ciudad, en capillas y en oficinas públicas y privadas donde hombres y mujeres como verdaderos anfitriones invitan a degustar de las aguas preparadas con frutas naturales como chilacayota, piña, limón, coco, tamarindo, guanábana, jamaica, mango, zapote, kiwi, melón, tuna, sandía, chía y horchata o el tradicional tejate, bebida prehispánica preparada a base de caco y hueso de mamey. Las nieves con sus ricos sabores de leche quemada, sorbete, mezcal, zapote, arroz con leche, elote, cacahuate, mamey o beso de ángel.
Una de las personas que siempre es recordada con cariño por haber impulsado esta tradición involucrando a negocios y viviendas y que al día de hoy fungen como puntos de encuentro y convivencia, es Doña Casilda Flores Morales, quien aprendió de su madre y su tía, y a la edad de 16 años le fue otorgada la licencia número 590 como expendedora de aguas frescas, según consta en el Archivo Histórico Municipal de Oaxaca. Casilda la Horchatera también es llamada la Samaritana Oaxaqueña, por haber llevado agua fresca durante mucho tiempo a los estudiantes del Instituto de Ciencias y Artes del Estado, hoy Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca.
En la Casa de la Cultura Oaxaqueña se encuentra el busto de Doña Casilda, el cual fue develado después de su fallecimiento en 1995 y fue la misma dependencia que tuvo la iniciativa de comenzar con la realización de concursos de arreglo de puestos a los que comúnmente les llaman pozos.
Es la Dirección de Turismo y Cultura, con el objeto de preservar y fomentar las tradiciones que forman parte de la identidad de la capital, organiza año con año el Viernes de la Samaritana que se ha convertido en una de las tradiciones urbanas más arraigadas con profundas raíces populares que van más allá de la religión, promoviendo también la campaña para cuidado del medio ambiente Trae tu vaso, por un Oaxaca limpio, con lo que se busca reducir el uso de materiales desechables.