
El Viernes de Dolores es un día especial para los fieles creyentes, ya que se conmemora el sufrimiento y el dolor que vivió la Virgen María al presenciar la pasión y muerte de su hijo, Jesucristo. Se celebra el viernes anterior al Domingo de Ramos, una celebración que marca el inicio simbólico de la Semana Santa según la tradición católica.
Durante este día, los fieles recuerdan los Siete Dolores de la Virgen, que son momentos clave de sufrimiento en su vida, como la profecía de Simeón, la huida a Egipto, la pérdida del niño Jesús, el encuentro con Él camino al Calvario, su crucifixión, su muerte, y su sepultura.
El Viernes de dolores es un día de recogimiento y reflexión, en el que se honra el papel de María como madre sufriente, solidaria con el dolor de la humanidad. En algunas regiones, se hacen procesiones, misas especiales y altares dedicados a la Virgen de los Dolores, también conocida como la Virgen Dolorosa.
Conoce más de la tradición en esta entrevista que nos dio el arzobispo de San Luis Potosí, Jorge Alberto Cavazos.