La Feria del Café, en el pueblo mágico de Xilitla, terminó convirtiéndose en un escenario de lucha libre cuando, al calor de las copas, que se le subieron a todo mundo, decenas de personas se agarraron a golpes por toda la sede del evento. Medias rotas, labios partidos y una que otra desgreñada, fue el saldo de la gresca que protagonizaron los asistentes a este evento.
Como topón pandilleril, borrachos y borrachas se agarraron a golpes y, aunque no se saben los motivos que iniciaron el refuego, todos se llevaron uno que otro golpe, jalón de greñas y uno que otro revolcón entre el pasto mojado, que sirvió de lona para que los beodos descargaran todas sus frustraciones.
Mientras este espectáculo de lucha libre improvisado se llevaba a cabo, a los elementos de la policía municipal se les olvidó a qué iban, pues casi con palomitas en mano, se pusieron a observar las distintas peleas, sin intervenir, como si no fuera su trabajo. Por otro lado, del alcalde ni sus luces, nadie pudo encontrarlo para informarle que hasta su director de Protección Civil se unió al zafarrancho batiéndose en duelo a cuchillo con un desconocido.
Hasta las damas perdieron el estilo al calor de las copas. En video quedaron varias captadas varias féminas trenzadas del cabello en el pasto, otras más, de pié, golpeándose; mientras, los hombres hacían lo mismo, pero en bolita.
Al finalizar la función de lucha improvisada, los heridos se retiraron, pero oficialmente el saldo fue blanco, pues no se registraron detenidos.
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