El diestro valenciano Enrique Ponce brindó a la afición potosina dos grandes faenas plenas de arte para dejar el último recuerdo en su noche de despedida.
Ante un lleno en la Plaza El Paseo con toros de la ganadería de Fernando de la Mora que resultaron bravos se llevó a cabo la esperada corrida.
Ponce recibió primero el homenaje de la empresa con una placa entregada por el empresario Joaquin Guerra.
Sus dos faenas con el mismo corte, pases tersos, ligados y templados.
Lamentablemente fallo con la espada pero en su segundo fue el público el que exigió la oreja que Ponce paseó en dos vueltas al ruedo.
Diego Silveti en su primer toro salio al tercio, su faena fue de calidad y con estocada de efectos pero el juez, pese a la petición popular le negó el triunfo.
En su segundo toro salio al tercio, decidió hacer la faena valiente pero esta vez pinchó para solo salir al tercio.
El hidrocalido Héctor Gutiérrez conquistó al público potosino siendo muy ovacionado; en su primero ante un toro complicado estuvo voluntarioso para ser aplaudido y en su segundo dio la vuelta al ruedo después de una faena de mucho valor.
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