Tres fuertes sismos sacudieron el territorio de Nicaragua entre el pasado lunes y las primeras horas de este martes 9 de noviembre, situación que encendió las alarmas en todo el país y en territorios cercanos ante la posibilidad de que se siguieran registrando más réplicas o que se pudiera producir algún tsunami dada la cercanía que mantiene esta nación con la costa del Pacífico.
De acuerdo con la información que ha circulado sobre estos hechos, la magnitud de los sismos fue de 5.8, 5.7 y 6.2 grados en la Escala de Richter, situación que provocó caos y devastación en algunos poblados donde los habitantes tuvieron que salir a la calle a mitad de la noche dada la intensidad con que se estaban presentando los movimientos de la tierra.
Los movimientos telúricos se presentaron en Masachapa y Tola, ambas poblaciones de Nicaragua en donde se desplegaron importantes operativos en los que participaron diversas corporaciones para atender la contingencia y poder rescatar a las personas que pudieran haber quedado atrapadas entre los escombros de los edificios que colapsaron.
Hasta el momento y a pesar de las dimensiones del hecho, todavía no se tiene un reporte preciso de los daños ni se sabe si hay personas heridas o decesos a causa de este fenómeno.