Derivado de la explosión que ocurrió el pasado 31 de octubre, en San Pablo Xochimehuacan, Puebla en una toma clandestina en un gasoducto de Petróleos Mexicanos, el número de fallecidos incrementó a tres. Se trata de una joven de 17 años que murió este martes.
Después de 10 días hospitalizada con quemaduras en el 32 por ciento de su cuerpo, falleció por una falla orgánica múltiple, según lo informó la Secretaría de Salud del Estado de Puebla.
El secretario de Salud, José Antonio Martínez, anunció también que dos personas fueron dadas de alta, una mujer de 19 años que ingresó al hospital con quemaduras en el 19 por ciento de su cuerpo y una pequeña de 6 años de edad con quemaduras de segundo y tercer grado en el 22% de su cuerpo.
Entre quienes permanecen hospitalizados, nueve en total, se encuentran siete en estado grave.
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