La activista trans Samantha Gomes Fonseca fue brutalmente asesinada a tiros en la alcaldía Xochimilco de la Ciudad de México, minutos después de salir del Reclusorio Sur. La Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la capital mexicana informó que la víctima se desplazaba en un taxi de aplicación cuando fue interceptada y atacada a disparos.
Según el periodista Carlos Jiménez, Gomes había visitado a un recluso conocido como ‘el Carnes’ en el Reclusorio Sur antes del fatídico incidente. La activista fue abordada por desconocidos que dispararon contra ella, causándole heridas mortales en el costado derecho.
A pesar de la rápida movilización de la policía de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) y paramédicos, estos últimos solo pudieron confirmar la trágica muerte de Samantha Gomes a causa de las heridas de bala. La Fiscalía capitalina ha anunciado que se investigará el caso bajo el protocolo de feminicidio.
La Policía de Investigación llevará a cabo entrevistas a testigos y analizará imágenes de cámaras públicas y privadas para esclarecer los detalles del ataque. Samantha Gomes, además de su activismo, participó como candidata por Morena en las elecciones pasadas, buscando una senaduría.
La activista trans desempeñó un papel crucial en la sociedad, impartiendo talleres y eventos dentro de instituciones penitenciarias. También brindaba asesoramiento a legisladores y funcionarios en temas relacionados con la diversidad de género y los derechos humanos.
Este trágico incidente subraya la persistente violencia contra la comunidad trans en México y la urgente necesidad de tomar medidas efectivas para garantizar la seguridad de las personas transgénero y abordar las causas profundas de la discriminación y la violencia de género en el paí.
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