El astronauta de la NASA, Butch Wilmore, informó de una situación inesperada mientras estaba a bordo de la nave espacial Starliner de Boeing, actualmente acoplada a la Estación Espacial Internacional (ISS). El sábado, Wilmore notó un ruido extraño proveniente de un altavoz dentro de la nave espacial, lo que generó incertidumbre sobre su origen.
Inmediatamente, Wilmore se comunicó con el equipo de misión en el Centro Espacial Johnson, en Houston, para reportar el problema. “Hay un ruido extraño que sale por el altavoz… No sé qué lo está produciendo”, comentó el astronauta, señalando que el sonido podría estar relacionado con la conexión entre la ISS y la Starliner, o tener otra causa desconocida.
El equipo en Houston respondió rápidamente, conectándose para escuchar el audio dentro de la nave. Wilmore acercó su micrófono al altavoz, permitiendo que los controladores de vuelo escucharan el sonido directamente. Según el equipo en tierra, el ruido fue descrito como un “ruido pulsante, casi como un ping de sonar”.
Tras grabar el sonido, Wilmore dejó el asunto en manos del equipo de control, que se comprometió a investigar más a fondo para determinar su causa y garantizar que no represente ningún riesgo para la misión.
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