La Fiscalía General del Estado (FGE) de Guerrero ha suspendido actividades en la región de Tierra Caliente debido a la creciente inseguridad en la zona. La fiscal general, Sandra Luz Valdovinos, emitió una notificación el pasado 21 de octubre alertando sobre una «situación de riesgo» y ordenó la suspensión de actividades para preservar la integridad física del personal.
La medida afectará a más de 25 oficinas ubicadas en los municipios de Ajuchitlán del Progreso, Arcelia, Coyuca de Catalán, Cutzamala de Pinzón, Pungarabato, San Miguel Totolapan, Tlalchapa, Tlapehuala y Zirandaro. La decisión se tomó después de una serie de incidentes violentos en la región, incluyendo el secuestro y asesinato de un policía ministerial en Ciudad Altamirano en agosto, el secuestro de la titular de la agencia del Ministerio Público en Coyuca de Catalán, Patricia Jaqueline Salgado, y el asesinato del fiscal regional Víctor Manuel Salas en septiembre, quien había asumido el cargo solo tres días antes.
La suspensión de actividades ha generado preocupación entre los residentes locales y subraya la gravedad de la situación de seguridad en la región. Las autoridades están trabajando para abordar la creciente ola de violencia y restablecer la seguridad en la zona afectada. Se espera que se tomen medidas adicionales para garantizar la seguridad de los ciudadanos y del personal de las autoridades locales en el futuro cercano.
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