Suman 13 soldados estadounidenses muertos tras los atentados registrados en el aeropuerto de Kabul, Afagistaán. El ataque se realizó en medio del operativo de repliegue de tropas y rescate de refugiados.
Estados Unidos prometió venganza contra el grupo terrorista Estado Islámico (EI), que se atribuyó el doble atentado de este jueves contra el aeropuerto de Kabul, donde otras 90 personas resultaron heridas.
Visiblemente afectado, el presidente Joe Biden prometió en un discurso a la nación desde la Casa Blanca que su país no perdonará ni olvidará estos ataques.
Y endureciendo su tono de voz, clamó contra el EI: “Los perseguiremos y haremos que paguen”.
Para ello, ordenó a sus comandantes militares que desarrollen planes operativos para golpear objetivos del EI en Afganistán, a sus líderes y sus bases, con el fin de responder “con fuerza y precisión”.
“Estos terroristas no ganarán -aseguró-. Rescataremos a todos los estadounidenses, sacaremos a nuestros aliados afganos y nuestra misión seguirá. EE.UU. no va a ser intimidado”.
Por ese motivo, las fuerzas estadounidenses continuarán con sus planes y seguirán con su misión en el aeropuerto de la capital afgana para sacar a esas personas fuera del país y culminar el repliegue de tropas hasta el plazo marcado, el próximo 31 de agosto.