San Luis Potosí se consolida como un eje estratégico del desarrollo industrial en el Bajío, destacando por su capacidad de atracción de inversión extranjera y su creciente infraestructura industrial. Según un reciente informe de CBRE, empresa especializada en servicios inmobiliarios, el estado ocupa un lugar clave en la región, favorecido por su ubicación estratégica, conectividad y pertenencia al clúster automotriz del Bajío.
Durante el tercer trimestre de 2024, San Luis Potosí alcanzó el 19% de la absorción bruta de espacios industriales en el Bajío, superado solo por Querétaro y Guanajuato. Esta dinámica se explica por la expansión de empresas ya establecidas, la venta de terrenos y la construcción de proyectos Build to Suit, así como edificios especulativos.
La región del Bajío cerró el trimestre con un inventario total de 14.1 millones de metros cuadrados de espacios industriales, reflejando un crecimiento anual del 5%. En este contexto, San Luis Potosí mantiene una tasa de disponibilidad de apenas el 3.4%, consolidando su atractivo como destino preferido para nuevos proyectos.
En términos de inversión extranjera directa (IED), el estado continúa liderando junto con Guanajuato, con aportaciones clave de países como Japón, Alemania y Canadá. Durante el primer semestre de 2024, la región acumuló $3,688 millones de dólares en IED, fortaleciendo su papel como motor económico nacional.
El fenómeno del nearshoring ha potenciado el interés en San Luis Potosí, gracias a sus ventajas logísticas, fuerza laboral calificada y modernas instalaciones industriales. Su participación en la industria automotriz lo posiciona como un referente en innovación y fabricación avanzada en México.
Con estas cifras, San Luis Potosí refuerza su papel como un pilar estratégico en el desarrollo económico del Bajío y del país, con un panorama favorable para seguir atrayendo inversiones clave en los próximos años.
