El balón Voit tenía la firma de Manuel Negrete, -digo tenía-, porque la tinta de esterbrook se ha ido borrando a punta de madrazos. Estos días se murió Oscar Chávez, otro gran mexicano. Volviendo…a tanta patada de mi pequeña al balón me ha hecho olvidar lo valioso que era para mí ese objeto. Con tal de brindárselo a ella para que deshaga su energía (pienso), es más importante compartir y amarla (re-pienso), lo demás es lo de menos (continuo). Manuel Negrete también me firmó una playera original de Los Pumas (tengo foto sin agrandarme pues). Este encierro me ha llevado a entender que lo más preciado (subjetivamente), es nada, comparado con entender que lo único preciado es objetivamente superior. Al tiempo, Negrete junto a Galindo y hoy Vela, son sin duda los jugadores mexicanos más talentosos que han existido en el futbol mexicano. No, no cuenta en esa categoría Márquez ni Hugo (este último era definidor no constructor). Ayer vi mi balón Voit, la firma de Negrete se ha ido desvaneciendo poco a poco; el canijo no se ha muerto y yo estoy más vivo que ayer que quizá vaya a la delegación que abandera en la CDMX a pedirle una firma de nuevo, aunque habrá que esperar a que salga de su cuarentena porque tiene coronavirus.
Mi pequeña no sabe quién es Negrete, pero sabe quiénes son Los Pumas y me gana en escogerlos, justo cuando decimos ¿tú qué equipo eres?
