
“Desde diciembre no ha recibido mi medicamento oncológico”, fue la denuncia que hizo una derechohabiente del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) quien aseguró que en la Clínica 50 no han renovado las licitaciones con los laboratorios que proporcionan las dosis para las quimioterapias. Diario, las enfermeras del hospital tienen que regresar a los enfermos que buscan recibir sus medicinas pues ya no cuentan con ellas en la farmacia.
Conseguir los medicamentos para el tratamiento del cáncer se ha convertido en un calvario para los derechohabientes del IMSS. Todo comienza cuando acuden a la clínica en la fecha indicada por el mismo hospital para recibir la dosis recetada por el médico. Las enfermeras los pasan al área de oncología, pero minutos después de entrar sus penden la aplicación por que no cuentan con los medicamentos necesarios, les piden su teléfono y con un “nosotros les llamamos cuando nos lleguen” los despiden.
Al preguntarles a las enfermeras alguna fecha tentativa de cuando contarían con las dosis necesarias para la quimioterapia, ellas no saben que decirles. Los enfermos han acudido con la dirección del Hospital, todos los departamentos encargados de conseguir los medicamentos y hasta al almacén. Los encargados se echan culpas hasta llegar al presidente, pero nadie sabe cuando se normalizará la aplicación.
Para tener una solución momentánea a su padecimiento, ellos proponen conseguir su propio medicamento y que el personal de la Clínica 50 se los aplique; sin embargo, chocan con la burocracia del servicio médico. Los hacen pedir una solicitud a la dirección del hospital para ver si les autorizan llevar su quimioterapia, para lo que tampoco les dan una fecha tentativa.
Si un enfermo de cáncer no recibe su medicamento en la fecha marcada por el oncólogo, su padecimiento podría agravarse severamente; el tumor podría crecer o diseminarse hacía otros órganos. Además de la salud, también afecta a su bolsillo si tienen que conseguir por su cuenta sus quimioterapias; los medicamentos básicos cuestan aproximadamente $10,000 pesos y, si en la receta se incluye una vacuna con anticuerpos, el gasto mensual asciende hasta los $50,000 pesos, cifra que con dificultad se pueden costear.
Los problemas en la Delegación Estatal del IMSS por la falta de medicamentos para pacientes con cáncer se han prolongado desde el mes de noviembre. En ese entonces, señalaron que se haría una contratación alternativa para poder atender a los derechohabientes; no obstante, esto solo fue un mejoralito al gran problema al que se enfrentan. Ahora, cientos de potosinos se han visto afectados por la falta de las dosis básicas.