El 13 de octubre se conmemora el Día Mundial de la Trombosis, fecha que busca concientizar acerca de las causas, factores de riesgo, síntomas, prevención y tratamientos de esta enfermedad a fin de reducir las muertes prematuras y la discapacidad que puede causar. En el Estado durante el 2022, se otorgaron 27 atenciones por embolias y trombosis, de las que una fue de tipo arterial y 26 de tipo venosa; de predominio en el sexo femenino con 15 atenciones.
La trombosis es la formación de un coágulo de sangre que tapa una vena o arteria, creando un tapón que puede generar múltiples complicaciones, es el principal factor responsable de las tres causas de muerte cardiovascular más importantes en el mundo, infarto agudo de miocardio, accidente cerebrovascular y tromboembolismo venoso, 1 de cada 4 personas en todo el mundo mueren por afecciones causadas por trombosis.
Actualmente, se conocen dos tipos de trombosis, la venosa y la arterial, la primera se forma en las venas, casi siempre en las venas profundas o a nivel de las piernas. Suele viajar por el sistema sanguíneo y alojarse en los pulmones generando al final una embolia pulmonar. Y la Trombosis Arterial, a diferencia de la anterior esta se forma a nivel de las arterias y es la principal causante de los paros cardíacos fulminantes.
Los principales factores de riesgo en la trombosis arterial son el sedentarismo, sobrepeso, la hipertensión, diabetes, hipercolesterolemia, entre otros; y en la trombosis venosa, el sedentarismo, las varices, el reposo prolongado, los viajes prolongados, el tratamiento hormonal, las enfermedades neoplásicas, entre otras. Por lo que las recomendaciones son acudir con su médico y optar por hábitos saludables, como iniciar con una sana alimentación y caminar (no ejercicio de alto impacto), procurar dormir con las piernas en posición ligeramente elevadas y evitar la vida sedentaria.
