Mientras que el alcalde Xavier Nava Palacios moviliza la Guardia Nacional para la represión de comerciantes ambulantes, en un día o noche “normal”, nadie, ni policías municipales, estatales, metropolitanos o los federales, vigilan las calles del Centro Histórico de SLP, lo que es aprovechado por delincuentes para robar en locales comerciantes ubicados en el primer cuadro de la ciudad.
La madrugada de este viernes 6 de septiembre un solitario ratero rompió el vidrio de un negocio de artículos deportivos ubicado en la esquina que hacen las calles Zaragoza y Guerrero, a una cuadra del Palacio Municipal en el centro de SLP, entró al local, se apoderó de 4 mil pesos que había en la caja registradora, agarró ropa y hasta se cambió los tenis viejos y se calzó unos nuevos, para luego irse con toda tranquilidad.
Aprovechando que la SEDUVOP tiene más de 10 largos meses sin poder concluir las obras de “remodelación” de la calle Guerrero, el delincuente operó tranquilo, sin prisa, impune.
La dueña del lugar ofreció declaraciones públicas a medios de comunicación en la que denunció la falta de seguridad, la falta de rondines policiacos, la falta de garantías, la falta de sensibilidad por parte del director de Seguridad Pública Municipal, Edgar Jiménez Arcadia, del director de Comercio, Gabriel Andrade Córdova, y el alcalde Xavier Nava.
Mientras que Edgar Jiménez Arcadia presume la “íntima” amistad el coronel Adrián Simón, responsable de la Guardia Nacional en SLP, lo que le vale que se hagan presenten en la represión a comerciantes ambulantes, esa “amistad” no se ha visto reflejada en una disminución de la inseguridad que posicionó a la capital entre las 50 ciudades más peligrosas de México.