Consciente de que se le están acabando las oportunidades y que si no es ahora, no será nunca, la exdiputada federal, Sara Rocha Medina, ha buscado la manera de dar madruguete a los actores políticos del PRI y del PAN en San Luis Potosí, prueba de ello son los intentos fallidos por armar estructura en el Altiplano Potosino valiéndose de perfiles altamente cuestionables que, además, durante años han vivido del erario público y no han hecho nada de provecho por la gente.
La también exsecretaria general del Comité Directivo Estatal del PRI y actual integrante del Comité Ejecutivo Nacional tuvo que soportar la derrota en 2021 cuando no pudo reelegirse como diputada federal, situación que atribuyen al evidente distanciamiento que tuvo con la ciudadanía, a la falta de compromisos cumplidos y a la larga lista de promesas que le hizo al gente en campaña y que olvidó una vez que llegó a la curul en San Lázaro.
Ahora, en la carrera rumbo a las elecciones de 2024, Sara Rocha ha comenzado a mover sus fichas para buscar un cargo grande; ya no quiere una diputación, la alcaldía sabe que la perdería, por eso, dicen, ya le echó el ojo al Senado a donde quiere llegar gracias a la alianza que podría darse entre el PRI y el PAN, pero, para ello, necesita estar bien posicionada, o al menos simular que lo está.
Así pues, la exdiputada ha conformado un equipo que, según ella, le trabajará el Altiplano Norte. Entre sus aliados se cita a Franco Luján, exfuncionario del Ayuntamiento y ahora secretario particular de Howard Aguilar, alcalde de Cedral; los hermanos Sagredo, jefes de la mafia del poder en los Ayuntamientos de Matehuala, mismos que se han enriquecido con dinero del pueblo; Rodrigo Méndez, alias “El Rorro”, excoordinador de campaña del candidato perdedor del Partido Verde a la alcaldía de la Matehuala, Tomas Zavala; el dinosaurio panista Víctor Mendoza, Miguel Ledezma, director de Desarrollo Social del Ayuntamiento de Matehuala y Raymundo Garfias Olivares, digno representante de la Herencia Maldita de Carreras; entre otros tantos que, durante años, se han servido con la cuchara grande del dinero público.
Tras darse a conocer las intenciones de Sara Rocha y luego de que se difundiera el famoso equipo, comenzaron a correr toda clase de versiones en las que, sobre todo, le auguran una derrota a la aspirante pues, reiteran, el pueblo está cansado de los mismos de siempre y, claramente, esta propuesta no huele, apesta a viejo.
