Luego de las diferencias y conflictos que los mantuvieron distanciados durante varios meses, la presidenta estatal del Partido Revolucionario Institucional, Sara Rocha Medina, y el alcalde de la capital potosina, Enrique Galindo Ceballos, volvieron a mostrarse juntos, sonrientes y listos para dar batalla en la contienda electoral que concluirá con la jornada democrática del 2 de junio.
En redes sociales, la lideresa del tricolor dio a conocer que se tuvo una reunión con los alcaldes priístas de varios municipios a fin de definir la línea de trabajo que se habrá de implementar en este proceso. Entre los presentes destacó Enrique Galindo quien pinta para contender por la reelección luego de que se definiera que será el PRI quien ponga candidato en la capital como parte de la coalición Fuerza y Corazón por San Luis Potosí, donde también participan el PAN y el PRD.
Sara y Enrique se llevaban bien, incluso, él fue su principal promotor cuando Sara arribó a la dirigencia estatal, pero los colaboradores de ambos los enfrentaron con sus grillas insanas y ambiciones personales. Así, Sara se distanció de Galindo y creyó que él era el enemigo, cuando la realidad era otra muy diferente.
La presidenta del PRI soltó su caballería en contra del alcalde y se alió con perfiles por demás cuestionables, los mismos que ya ni siquiera quieren en el PRI, pero ella se aferró a defender, les dio chamba y lo usó como carne de cañón en sus venganzas, las del exgobernador Juan Manuel Carreras y las de Horacio Sánchez Unzueta quien, actualmente, está más vigente que nunca en la coalición.
Los rumores dicen que Galindo será candidato una vez más, pero Sara había prometido que eso no pasaría. Se cree que, ahora, ante el escenario que ya enfrentan juntos, quedó claro que deben quedar de lado las diferencias personales y apostarle a trabajar en equipo para rescatar lo que sea posible a través de la coalición.
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