Oficinas vacías y pésimas cuentas es lo que dejará la administración que encabezó durante más de cinco años el ahora diputado panista Ramón Torres García quien, a pesar de que ya tiene un nuevo hueso para seguir sangrando al erario, ordenó saquear el Ayuntamiento de Rioverde y no dejar ni papel en los baños para que el nuevo gobierno pueda empezar a trabajar.
Imágenes que circulan en redes sociales dan testimonio del saqueo que se está cometiendo en el Ayuntamiento pues, en los últimos días, han sido muchos los vehículos que llegan y cargan decenas de cajas en las que, según cuentan los propios trabajadores municipales, se están llevando todo lo que pueden, no importa si era propiedad del Municipio o no; lo mismo artículos de oficina que insumos y materiales de limpieza. Todo es bienvenido.
Las camionetas, cargadas ágilmente por trabajadores del flamante diputado, son llevadas a bodegas de su propiedad en donde se almacenan los recursos que, en algún momento pudieron ser de utilidad para los rioverdenses, ahora, a disposición de Ramón Torres y compañía.
Allegados al exalcalde insisten en que la indicación fue clara; deben llevarse todo lo que sea posible y que la nueva administración se las arregle para trabajar, que busque sus propios recursos y que vea de dónde saca dinero pues, otra de las grandes deficiencias serán los recursos ya que, aseguran, no hay ni siquiera para terminar el año.
Ramón Torres García fue alcalde de Rioverde en dos periodos pues, como se recordará, consiguió la reelección en 2018, esto, a pesar de que hundió al municipio en una severa crisis de violencia e inseguridad, sin dejar de lado todas las denuncias y los escándalos por malos manejos de recursos públicos y hasta de corrupción que se le imputaron a él y a varios integrantes de su equipo de trabajo. Aun así, en 2021 logró quedarse con la diputación del Distrito X donde, acusan, seguirá sirviéndose de los recursos públicos.