Los arqueólogos de la Nicolaus Copernicus University, en Polonia, han hecho un descubrimiento sorprendente en excavaciones cerca del poblado de Dąbrowa Chełmińska. Después de encontrar en 2022 los restos de una mujer enterrada con artefactos para evitar que regresara al mundo de los vivos, ahora han hallado los restos de un «niño vampiro» en una tumba inusual.
Los restos corresponden a un niño de entre 5 y 7 años, cuyo cuerpo fue colocado bocabajo en la fosa de su tumba. Esta posición sugiere que existía el temor de que el niño pudiera regresar de la muerte y morder a los vivos. Según los registros de la universidad en Polonia, poner el rostro de la persona hacia abajo se creía que evitaría que el difunto mordiera el suelo y por ende, no representara una amenaza para la población.
En Pien, Polonia, descubrieron el esqueleto de un "niño vampiro" de entre 5 y 7 años acostado boca abajo y 'atado a la Tierra' por los tobillos, estas precauciones se cree que fueron tomadas para asegurarse de que no pudiera regresar de entre los muertos. pic.twitter.com/NWHW2eIoBH
— David Zarate (@El_Planeta_MX) August 13, 2023
Aunque solamente se ha encontrado una parte del esqueleto del niño, específicamente la parte inferior de la pierna, los arqueólogos descubrieron un candado triangular acompañando los restos, similar a otros artefactos encontrados junto a restos de individuos considerados vampiros.
Dariusz Polinski, quien dirige el equipo de científicos, explicó que se removieron los restos del cadáver del niño, pero hasta el momento se desconoce la razón detrás de esta acción. Se especula que los restos podrían haber sido profanados, aunque aún no se ha confirmado.