Elementos de la Fiscalía General del Estado de San Luis Potosí, adscritos a la Zona Media en coordinación con la Unidad Especializada para el Combate al Secuestro (UECS), rescataron a una mujer y su menor hijo, quienes fueron víctimas de un intento de extorsión telefónica.
Todo comenzó cuando el esposo de la afectada solicito el apoyo de los policías investigadores, pues comenzó a recibir llamadas del número 4781020305 donde le señalaban que tenían secuestrada a su pareja e hijo y que para poder liberarlos con vida tenía que depositar dinero.
Indicó que lo único que él había averiguado, era que su mujer tomó un taxi del ejido El Progreso en Rioverde de donde son originarios, a la cabecera municipal, y de ahí no sabía más de ellos, además de que al intentar comunicarse el celular mandaba al buzón.
De inmediato se implementó un dispositivo de búsqueda en hoteles, moteles, centros comerciales, terminal de autobuses y hospitales de Rioverde, San Ciro de Acosta y Ciudad Fernández, y se pidió la colaboración con la UECS en la ciudad capital.
Posteriormente, las dos personas fueron localizadas en un hotel de la colonia Himno Nacional segunda sección de San Luis Potosí, hasta donde los extorsionadores movieron a sus víctimas, mismas que se encontraban sanas y salvas.
La mujer refirió que recibió una llamada del número 4871020305 en donde le decían que se había recibido llamadas de su celular al 911, reportando extorsiones, por lo que sería detenida si no hacía caso de lo que se le indicara.
Ante eso, ella salió de su domicilio rumbo a Rioverde con 200 pesos en su bolsa, y estando en la cabecera municipal, los extorsionadores le depositaron 500 pesos para que se trasladara a la capital potosina, “porque ahí se estarían haciendo los trámites correspondientes” y que no debía hacer ni contestar llamadas de sus familiares, sino “los estaría metiendo en problemas”; llegando a la ciudad de San Luis Potosí, le volvieron a depositar dinero para que se hospedara en un hotel y comprara comida, pero antes de que se concretara la extorsión, la autoridad la ubicó y le explicó la situación, sin que se depositara cantidad alguna de dinero.
Tanto la afectada como su bebé fueron reunidas con el padre de familia, quienes fueron levados de regreso a su lugar donde vivían en la zona Media.
