El llamado reloj del juicio final ha tenido su uso en el colectivo mundial y comunidad científica desde 1947, su historia tuvo lugar gracias al Boletín de Científicos atómicos de la universidad de Chicago, como parte de la crisis mundial que atravesaba el mundo por la crisis mundial y guerra fría que azotaba al mundo con el miedo de una guerra nuclear que parecía estar a nada de acabar con todo. Con esta crisis ahogando al mundo, el Boletín de Científicos atómicos se dio la tarea de realizar un conteo o dispositivo que pudiera mostrar el estado del mundo ante una inminente catástrofe mundial.
Fue entonces cuando el grupo de la Universidad de Chicago dejó el encargo en manos de Martyl Langdorf, quien tuvo la idea de plasmarlo en un reloj, que diera la sensación en todo momento de un peligro inminente, situando el reloj a 7 minutos de la media noche en ese momento. Siendo que cada vez que se acerca más a la media noche cuando el final de la humanidad está más cerca de ocurrir.
Este reloj se ha ido modificando con el paso de los años, quedando a merced de los acontecimientos que acontecen en nuestro mundo, siendo pandemias, guerras, cambios climáticos, sobre población y así como los avances tecnológicos que pudieran ocasionar en el mundo un daño irreversible lo que ocasiona que el reloj aleje o acerque sus manecillas a la media noche.
Desde que tuvo su creación en el año de 1947, este año 2023 el reloj se encuentra en el punto más cerca de la media noche en toda su historia, encontrando a 90 segundos de la temida medianoche, todo esto por las tensiones acumuladas, que desde el 2010 el reloj solo ha ido aumentando, en contadas ocasiones desciendo pero siempre avanzando hacia adelante. Este año el mundo afronta la guerra y tensiones políticas entre Ucrania y Rusia, así como los daños y desestabilización que la pandemia del Covid dejó en el mundo, sumando ya a este complicado panorama el avance de las IA así como la cada vez mayor dependencia de la sociedad en la tecnología, así como el cambio climático que se convierte en la mayor probabilidad de terminar con el mundo según diversos estudios científicos. Dejando el panorama para la seguridad mundial pendiendo de un hilo en este momento. Estando en el punto más crítico de toda su historia.
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