Convencidos de que la instalación de una subestación de gas en su zona residencial representaría un peligro inminente, vecinos de colonias como San Lorenzo y Tercera Grande se manifestaron en las inmediaciones de las obras de una gasera para exigir, tanto a la empresa responsable como a las autoridades, suspendan su instalación.
La privada residencial denominada El Cielo sería la principal afectada, ya que, prácticamente, solo una barda separa las casas de las instalaciones de la subestación de gas, por lo que vecinos de este complejo habitacional fueron los primeros en alzar la voz y recolectar las evidencias para presentarlas ante el Ayuntamiento de la capital potosina para que tomaran el caso, sin embargo, en dos años no han arreglado absolutamente nada.
En este sentido, por parte del municipio capitalino, solo ha llegado a colocar los sellos de obra suspendida, aunque esto poco o nada les importó a los responsables de la construcción de la gasera, ya que continuaron trabajando con total impunidad a tal grado de ya llevar el 80% de avance de las obras, por lo que es cuestión de algunos días para que la gasera comience a surtir el combustible, dejando en la incertidumbre y el miedo a los vecinos afectados por una potencial explosión.
Cabe mencionar que ha sido tal el hermetismo de la construcción de la gasera que los vecinos demandantes no conocen exactamente de que compañía de gas se trata. En ocasiones, cuando han tenido oportunidad de enfrentar a los trabajadores o arquitectos que entran y salen de la obra, estos no dan explicación alguna de quién los contrató, solo se limitan a construir lo que sería una bomba de tiempo que afectaría a las diferentes colonias de la zona.
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