El mundo enfrenta una crisis de agua causada por la falta de lluvia, ante ello se han creado técnicas para enfrentar la escasea del líquido vital y una de ellas es la siembra de nubes.
La siembra de nubes es una técnica que consiste en liberar partículas de yoduro de plata u otros aerosoles en las nubes. El objetivo de este proceso es causar lluvia o nevadas y para ello se utilizan aviones, drones o cohetes.
Un texto publicado en The Conversation, William R. Cotton, afirma que la siembra de nubes opera dependiendo del tipo de nube: si está sobreenfriada o es cálida y requiere materiales higroscópicos con capacidad para absorber la humedad.
Para que la estimulación de las lluvias funcione es necesario que haya nubes con agua muy fría en un caso contrario, no se puede estimular artificialmente la precipitación.
Los orígenes de la técnica de la siembra de nubes se remontan a los años 40 del siglo XX, en específico a las investigaciones de Vince Schaefer, en 1946, este científico roció hielo seco triturado sobre nubes con estratos sobre enfriados para provocar lluvia.