Este viernes 10 de mayo, en un día que debería significar festejos y felicitaciones para todas las mamás, personas que son parte de la Organización Fe y esperanza Para Víctimas del Delito Christian, A.C., salieron a las calles para exigir justicia por cada uno de sus familiares que han sido asesinados, desaparecidos, violados y secuestrados por criminales que ahora gozan de total impunidad.
Encabezadas por la maestra María del Rosario Torres, el contingente que estuvo conformado por poco más de 50 personas, empezó su recorrido frente al Museo del Ferrocarril, en la Alameda Central, de ahí se trasladaron a la Fiscalía General del Estado, sobre la avenida Eje Vial causando el primer colapso de vialidad para todos los automovilistas particulares y usuarios del transporte urbano. En ese lugar, estuvieron poco más de 30 minutos esperando a que el fiscal general, Federico Garza, saliera a atenderlos, todo esto mientras complicaban más la circulación de los coches, ya que en ocasiones invadían los dos carriles para desesperación y hartazgo de los que por ahí pasaban.
La maestra María del Rosario Torres, ya en entrevista, comentó que la marcha emulaba a la que se hacía en esos mismos instantes en la Ciudad de México de las madres de hijos desaparecidos, así, Organización Fe y Esperanza Para Víctimas del Delito Chistian, A.C., quiso sumarse al movimiento para que las autoridades encargadas de la impartición de justicia se ponga a trabajar para dar cuentas claras, “no tenemos nada que festejar, estamos muertas en vida”, aseveró la maestra mientras otras mujeres levantaban sus pancartas de consigna. Asimismo, Rosario Torres aseguró que la marcha es también para concientizar a la sociedad y hacer la unión para cambiar al país de la terrible situación por la que está pasando en cuestión de seguridad.
Después de no recibir respuesta alguna en la Fiscalía, el contingente reanudó su marcha rumbo a Plaza de Armas y colocarse frente a Palacio de Gobierno para, ahora, exigir al gobernador la atención necesaria en cada uno de sus casos.
