Un hombre se puede enfrentar a una multa de casi dos millones de pesos si intenta engendrar un bebé más, informaron autoridades de los Países Bajos. La razón: ya ha procreado a más de 550 niños.
Desde 2007 el sujeto, identificado como Jonathan, habría comenzado a donar esperma en bancos de fertilidad diseminados por el territorio neerlandés. Diez años después, en 2017, las autoridades del país europeo habrían notado que procreó más de 100 hijos, lo que está fuera de la ley.
De acuerdo con las normas que rigen la fertilidad en Países Bajos, un donante de esperma no puede procrear más de 25 niños en 12 familias diferentes, además de tener la obligación de notificar cada embarazo exitoso a las autoridades.
El problema con Jonathan es que no se detuvo en 2017: durante seis años más, hasta 2023, estuvo proveyendo de su material genético a una clínica privada en Dinamarca, la cual envió su esperma a distintas clínicas en Europa. Se calcula que debe tener más de 550 diseminados en el Viejo Continente.
La súper procreación tiene riesgos importantes, como el hecho de que, en el futuro, dos medios hermanos puedan formar parejas sin saberlo, lo cual podría implicar riesgos importantes de enfermedades hereditarias.
«Todos estos padres ahora se enfrentan al hecho de que los niños de su familia son parte de una enorme red de parentesco, con cientos de medio hermanos, que ellos no eligieron», señaló el Tribunal de La Haya que sentenció a Jonathan.
El hombre, quien tiene 41 años de edad, tiene estrictamente prohibido ofrecer, vender o regalar su semen a parejas para procrear más niños, y el incumplimiento de esta norma podría hacerlo acreedor a una multa de casi dos millones de pesos, decretó la sede judicial.
