
Villa de Zaragoza, SLP.- Ejidatarios de Villa de Zaragoza clausuraron hoy el acceso al pozo de agua que abastece a los habitantes de la cabecera municipal del vital líquido, al mismo tiempo cerraron el paso al tiradero municipal, en protesta por los malos tratos y la corrupción con la que, aseguran, se maneja la presidenta municipal, Paloma Bravo, a quien responsabilizan de las consecuencias de los hechos.
Los quejosos se duelen de la indolencia de Gobierno del Estado que lejos de buscar aplicar la ley y buscar la reconciliación entre los zaragonenses, protegen y dan impunidad a la alcaldesa que ahora es responsable de dejar sin agua y sin un lugar donde tirar la basura a todo el pueblo.
El último agravio que vivieron los habitantes de Villa de Zaragoza ocurrió el fin de semana pasada cuando la alcaldesa, Paloma Bravo, los obligó a pagar transporte para recibir los beneficios del seguro catastrófico, en esta acción, la edil tuvo la complicidad del titular de la SEDARH, Alejandro Cambeses Ballina. Se trató de un castigo, dicen, porque a las personas de comunidades que están con Paloma Bravo, les llevaron el recurso hasta sus ejidos.
La crisis en Villa de Zaragoza ya tiene varios meses y lejos de llegar a una solución pacífica y la negociación para dirimir diferencias, tanto la alcaldesa Paloma Bravo como los intermediarios de Gobierno del Estado han profundizado los problemas.
Diputados del Congreso del Estado han formado parte de las mesas de negociación en busca de una solución a los problemas, sin embargo la velocidad de la diplomacia no va al ritmo de la inconformidad de la gente.