Con un presupuesto superior a 9.5 billones de pesos, el gobierno federal y la Cámara de Diputados trabajan intensamente para ajustar las cuentas del presupuesto de 2025. Este incluye, entre otros aspectos, una reducción del déficit del 5.9% al 3.5%, la asignación de más de 6 billones de pesos a gastos indispensables, y la destinación de más de 1.3 billones para proyectos prioritarios y programas sociales, incluidos tres nuevos impulsados por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.
Para lograrlo, representantes de la Secretaría de Hacienda y de la Cámara de Diputados han mantenido reuniones constantes. El vicecoordinador de Morena en la Cámara, Alfonso Ramírez Cuéllar, destacó que ya se ha decidido que el 65% del presupuesto, es decir, más de 6 billones de pesos, se dirigirá a gastos obligatorios para el Estado, como el pago de deuda, participaciones a estados y municipios, y pensiones, entre otros.
También se ha definido una base presupuestal para los tres nuevos programas sociales de Sheinbaum: pensiones para mujeres entre 60 y 64 años, atención médica y visitas domiciliarias para adultos mayores y personas con discapacidad, y un programa de apoyo para gastos escolares desde preescolar hasta secundaria. Para estos programas, se prevé una inversión de entre 80 y 90 mil millones de pesos, con una implementación gradual.
En conjunto, se estima que los programas sociales tendrán una bolsa de más de 500 mil millones de pesos, destinada a financiar becas escolares, Pensiones del Bienestar, Sembrando Vida y Jóvenes Construyendo el Futuro, entre otros.
Adicionalmente, se proyecta destinar el 3% del PIB, lo que equivale a alrededor de 800 mil millones de pesos, para las obras prioritarias de la presidenta. Esto incluye la construcción de nuevas líneas de ferrocarril, mantenimiento y renovación de carreteras, ampliación y modernización de puertos y aduanas, inversiones en electromovilidad y proyectos relacionados con el agua.
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