En Yucatán, la forma de romper las piñatas durante las fiestas decembrinas es muy diferente a la tradición de otras partes de México. En lugar de golpear la piñata con un palo, como es común en el resto del país, los niños (y a veces adultos) lo hacen a puño limpio. Esta variante, conocida como el estilo «montonero», consiste en que los participantes se agrupan alrededor de la piñata y la golpean con las manos, a menudo protegidas por una bolsa de plástico.
Aunque esta práctica pueda parecer agresiva o peligrosa, las piñatas en Yucatán son hechas de materiales suaves, como cartón delgado o papel maché ligero, lo que facilita romperlas con las manos sin causar accidentes. La diversión radica en el bullicio, las risas y el entusiasmo de los espectadores que guían a los niños mientras intentan acertar en sus golpes. Las bolsas no solo sirven para proteger las manos, sino también para recoger los dulces que caen cuando la piñata cede.
Aunque no se conoce el origen exacto de esta costumbre, algunos la asocian con el espíritu comunitario y juguetón de las celebraciones yucatecas. Además, al no usar palos, se evita el riesgo de accidentes, especialmente en espacios pequeños o con grupos reducidos. Esta forma de romper la piñata refleja la calidez, alegría y participación colectiva que caracteriza las festividades en Yucatán, donde la tradición es compartida por todos.
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