El papa Francisco aceptó la renuncia de monseñor Andrzej Franciszek Dziuba, obispo de la diócesis de Łowicz, en Polonia, acusado de encubrir abusos sexuales a menores. La decisión del pontífice la tomó tras recibir la petición de la Santa Sede de quitarle su puesto a Dziuba.
«El Santo Padre ha aceptado la renuncia al gobierno pastoral de la diócesis de Łowicz (Polonia), presentada por Su Excelencia Reverendísima Monseñor Andrzej Franciszek Dziuba», se indica escuetamente en el boletín de la Sala de prensa de la Santa Sede.
El caso de Dziuba de 73 años, comenzó desde el 2020, cuando el arzobispo metropolitano de Lodz, Grzegorz Rys presentó ante la Santa Sede una serie de documentos en las que se exponen las denuncias de abusos en contra de menores.