A pesar del constante movimiento de personas y vehículos así como de la renovada imagen con alumbrado nuevo, los rateros mantienen el pánico y temor entre los vecinos de la Colonia de Tequis, ya que en los últimos días se ha registrado un aumento importante en el número de robos, asaltos y vehículos de la ciudadanía.
Los amantes de lo ajeno han tenido que recurrir a cristalazos a vehículos para poder abrir algunos de los vehículos de vecinos de la colonia, quienes no pueden dormir tranquilos por el miedo a despertar y que sus vehículos hayan sido abiertos, o incluso, ya no estén en el lugar.
Desafortunadamente, esta práctica se ha vuelto “normal” según algunas personas que llevan muchos años viviendo en calles como Mariano Otero, Benigno Arriaga, Tomasa Estéves o Mariano Arista. “Siempre se han dado cristalazos y arrancan los estéreos, es como una pandilla que anda aquí y no se puede vivir tranquilo”, apunta uno de los afectados de los últimos días.
“Estos weyes abren los carros y se chingan las baterías, ya ni la muelan, hacen su desmadre por 400 pesos y al que friegan es a uno. Es bien pinche caro reparar el carro”, comentó un habitante de la zona.
Debido al renovado alumbrado que se ha puesto en el Jardín de Tequis, los ladrones han tenido que trasladarse a las calles aledañas para poder continuar con sus fechorías y triquiñuelas, buscando las calles más oscuras y a la gente más indefensa para poder seguir operando sin importar la hora del día.
El llamado que hacen los vecinos a la autoridad es que puedan apoyar con policías y garantizar la seguridad a su persona y patrimonio.