El Partido Acción Nacional (PAN) dio el tiro de gracia a Xavier Nava al desechar de manera tajante los diferentes recursos de impugnación que presentó como parte de su pataleo tras haber sido derrotado en la elección interna de dicho instituto político para elegir a quien será su candidato a gobernador, sin embargo, aunque se creía que este sería el ocaso político del alcalde con licencia, el partido Movimiento Ciudadano decidió recibirlo con los brazos abiertos y darle la oportunidad de buscar la reelección en la alcaldía capitalina.
Fue el pasado 4 de febrero cuando la Comisión de Justicia del Comité Ejecutivo Nacional del PAN emitió el resolutivo final del análisis realizado a la impugnación de Xavi Nava, mismo que califica como inoperantes e infundados los agravios denunciados por el ahora exprecandidato panista.
En el escrito detalla con suma precisión que Nava Palacios se puso a denunciar cuantas irregularidades quiso, sin embargo, no tuvo forma de demostrar la comisión de las mismas, es decir, no aportó la pruebas para demostrar que los que decía fuera verdad. A eso le agrega que algunos de sus supuestos testigos perdieron credibilidad por trabajar en el Ayuntamiento de San Luis Potosí y que en ciertos rubros de sus quejas, apeló a temas que ni siquiera aparecen en la Constitución.
A pesar de que ya se le cerraron las puertas en el PAN y de que se va demostrando ser un perfil por demás conflictivo, Movimiento Ciudadano decidió recibirlo con los brazos abiertos y le ofreció la posibilidad de reelegirse como alcalde, sin embargo, obtener el triunfo no será cosa fácil dadas las incontables deudas que tiene con muchos sectores de la capital y los rivales que se estarán presentando en otros partidos.
Con esta oferta, Eugenio Govea perdona todas las ofensas, los agravios y las humillaciones que Xavi Nava le hiciera luego de haber ganado las elecciones en 2018 al desdeñar los esfuerzos que el líder naranja hiciera para ayudarlo a crecer en la contienda. Algunos dicen que, en realidad, Govea no está haciendo otra cosa más que utilizar a Nava para vengarse, mantener el registro del partido y asegurar, de nueva cuenta, su diputación plurinominal.
Mientras se define el escenario, hay quienes aseguran que a Nava no lo calienta ni el sol, prueba de ello fue la imagen demacrada que dio el pasado jueves en el aeropuerto; flaco, ojeroso, cansado y con pocas ilusiones tras ver esfumarse sus sueños de ser gobernador y tener que conformarse, ahora, con ser candidato para la reelección por un partido que, difícilmente, le asegura el triunfo.