Pese al pasó de los siglos, Pahuatlán es uno de los pocos lugares que conserva sus traducciones intentas, sus habitantes se han encargado de honrar y realizar “al pie de la letra” año con año sus festividades. Su forma de vida conquista a todos los turistas que visitan el Pueblo, por ello este destino tiene que incluirse en la lista de lugares por visitar de México. Pahuatlán se encuentra entra en la Sierra Norte de Puebla, el cual marca la entrada al Totonicapán, un área cultural de la civilización totonaca.
En Pahuatlán existen dos tipos de plantas típicas de la región, las pahuas y los cafetos; el primero es una variante del aguacate que se diferencia por se más curveado y los cafetos son una especie de planta productora de café. Dichas plantas son utilizadas para la preparación de recetas de las culturas náhuatl y otomí, las cuales son de los platillos más deliciosos que puedes preparar.
El nombre del pueblo mágico proviene de “pahuatl”, que significa fruta o aguacate y de “tlan” que se traduce como junto o entre los frutales. El pueblo de Pahuatlán es reconocido por la fertilidad de la tierra, en su mayoría es productora de aguacate y café.
Al formar parte del reino de Totonaca, se conserva el la Danza de los Voladores de Totonacapan. Otras de las creencias más comunes del lugar son los chamanes o brujos, los cuales se consideran que tienen el poder para curar malestares de las personas; incluso se recure a ellos para resolver conflictos familiares.
Entre sus platillos más deliciosos destaca los tamales de cacahuate, de hollejo, o de pascal, tacos de cecina ahumada, salsa de chicales (una especie de hormiga) y guisos a base de flores. Más usuales están las acamayas, el chicharrón, el mole, el pipián, o chayote con queso. Como postre hay dulces a base de piloncillo, o atoles de cacahuate o de piña, el pascal de cacahuate con pepitas, y vinos de frutas.