El padre Tomás Cruz Perales, vocero del Arzobispado potosino denunció una ola de violencia en iglesias y parroquias de la zona centro de la Capital, protagonizados por drogadictos y personas alteradas de sus facultades.
En conferencia de medios dijo que se ha desbordado la inseguridad en los templos de San Juan de Dios, San Francisco, La Basílica, Sagrado y Espíritu Santo, entre otros, donde los adictos en sus delirios y desesperación han entrado a intentar robar las limosnas, violentar a las personas, causar destrozas y ofender a los padres.
“En Espíritu Santo se tuvo que cancelar una misa por el escándalo que ocasionó un adicto, de igual forma un sacristán fue descalabrado por una de estas personas, en otra más se requirió de cinco policías para poder controlar a otro sujeto evidentemente intoxicado”, sostuvo el padre Tomás Cruz Perales.
Dijo que la iglesia no se queja por falta de seguridad, “si bien las cámaras de video y los botones de pánico no sirven, la Policía municipal ha acudido de inmediato, el problema mayor es el nivel de intoxicación de los adictos”, indicó.
Dijo que ya se encuentran en coordinación con Seguridad Pública Municipal, sin embargo demandó una mayor coordinación entre todos los niveles de gobierno para enfrentar este problema producto de la venta desmedida de drogas sintéticas en nuestra ciudad.
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