En el bello estado de Oaxaca, en la localidad de Juchitán, existe una de las tradiciones más ricas para todos los mexicanos, «los tamales», sin embargo su receta posee un ingrediente secreto y en peligro de extinción, por supuesto estamos hablando de la iguana verde.
Como la iguana es una especie en extinción los ambientalistas de Juchitán y en toda la región del Istmo de Tehuantepec buscan la manera de generar conciencia y evitar que se siga cazando y consumiendo este reptil perteneciente al reino Animalia. Pero los mismos ciudadanos expresan que es todo un manjar la carne de iguana y que la seguirán consumiendo.
La caza y venta de esta especie sobre sale a los 500 iguanas diarias, estas cifras son principalmente durante la cuaresma. Esta se debe a que, en esta localidad se acostumbra preparar tamales para ofrecer en la mesa a todos sus seres queridos; y alegan que la iguana le da un toque delicioso. Imposible no incluirlo en la receta. «Sabe a pollo pero no es pollo», cuenta un ciudadano a la agencia Efe.
Desafortunadamente y cómo se esperaba, el alto nivel de consumo de la iguana verde, ha provocado que los niveles de la presencia de esta especie disminuyan drásticamente, ocasionando que en un momento la iguana verde se llegue a extinguir en este lugar.
«No se puede prohibir su consumo, pero hay que dar alternativas para preservar la especie», señala el encargado del iguanario del Foro Ecológico Juchiteco, Juan Celis.
Ciudadanos expresan que esta receta tiene años y que se ha compartido de generación en generación. De echo en las familias se les enseña cómo cazarlos con resorteras y como preparar las iguanas para sopas, caldos y su gran especialidad, los tamales.
