
Por primera vez una mujer logra entrar al cuerpo Navy Seal uno de los ejércitos más demandantes, para poder pertenecer a el debes pasar por pruebas tan difíciles como carreras de 23 horas y ocho kilómetros de nado. Después años donde no se le permitía a ninguna mujer pertenecer a las Fuerzas Armadas de Estados Unidos por tener solo puestos de rol de combate, una mujer logró conseguir los resultados para formar parte del Cuerpo Armado de la Marina.
El almirante Hugh Howard III Naval Special Warfare Command aseguro que la candidata mostró carácter y liderazgo con excelentes resultados, el nombre de la mujer no se dio a conocer pero esto es algo que caracteriza a los cuerpos especiales ya que no comparten información personal de sus miembros.
Todos los aspirantes son para naves de combate especial, el «Special warfare cambatant-craft crewmen’, en total fueron 18 aspirantes quienes pudieron pasar las pruebas incluyéndola a ella. Se le reconoce tal logro porque solo un 35% de aspirantes pueden pasar la prueba pues es muy demandante.
A la prueba más difícil se le conoce como Tour que son 23 horas de carreras y 8 kilometros en escenarios sumamente difíciles. Las mujeres logran poder ser parte de la milicia estadounidense a partir del 2015 cuando el Secretario de Defensa Ashton anunciara la apertura para las a cualquier sector de o posición en las Fuerzas Armadas.