Zelandia Borquez Estrada, integrante del Consejo Estatal Electoral y de Participación Ciudadana (CEEPAC), habría intervenido en el Comité Municipal Electoral para hacer válido el registro de la candidatura anómala y fuera de la ley de Xavier Nava Palacios, alcalde con licencia y aspirante a la reelección en el municipio de la capital.
“La consejera Zelandia Bórquez Estrada, operó para que los indecisos integrantes del Comité Municipal del mismo organismo dieran por buena la candidatura sin complicar el asunto, haciéndoles ver que ya serían los tribunales competentes los que detendrían, o no, la referida candidatura. Vergonzoso”, escribió el historiador y columnista Óscar G. Chávez.
En una muy dura crítica a los miembros del CEEPAC, Chávez señala que el único papel que estos cumplen a la perfección es el de mediocres, y fustiga la omisión, tibieza, o franca connivencia con las anomalías que se están dando en este proceso electoral, como es el caso del registro del señalado Xavier Nava Palacios.
“No se necesita ser especialista en el tema electoral para percatarse de la tibieza e inoperancia de la instancia que debería regular fondo y formas, el Ceepac…ha dejado en claro que, en los asuntos de relevancia, sus integrantes se muestran indecisos, disminuidos”, escribió el articulista de Pulso el sábado 27 de marzo. Luego se lamenta: “Y pensar que en algún momento fue nuestro orgullo”.
Chávez cita dos casos, el de Héctor Serrano Cortés, diputado federal al que sí se le negó el registro para una candidatura a diputado local por la vía plurinominal; y el de Xavier N. Palacios, “quien pretende contender a la alcaldía, de nueva cuenta, sin cumplir con los requisitos básicos.
Como se ha informado en múltiples notas, la candidatura de Nava sería improcedente desde el momento en que la Ley Electoral marca que los candidatos a reelección deben ser registrado por los mismos partidos que abanderó en una primera instancia; aunque sea por uno de ellos.
Y sucede que Xavier Nava ahora es candidato por MORENA, cuando los partidos por los que participó en 2018 fueron el PAN y Movimiento Ciudadano.
Por ello, señala el articulista, pareciera ser un caso “sencillo”, “apelando a la lógica”, y el “sentido común” de los consejeros. Sin embargo, añade que éste resultó más complejo, “y no por la aplicación o interpretación de las leyes, sino porque al parecer la citada consejera Zelandia metió las manos con los integrantes del Comité Municipal del mismo CEEPAC para favorecer a Nava.
En la misma lógica, deduce Óscar Chávez: “Los miembros del ya mencionado Comité, no tenían más que considerar lo siguiente: al ir a una elección consecutiva a presidencia municipal los únicos partidos que pueden postular, son los que en origen lo hicieron (en este caso PAN, y Movimiento Ciudadano que fueron en coalición en 2018), y al no hacerlo no es una elección consecutiva, ni legal”.
Y añade: “La única salvedad que brindan el artículo 115 constitucional y 114 de la Constitución Política de San Luis Potosí, es que un militante que haya ido asociado de un partido político se haya separado, renunciado, o perdido su militancia antes de la mitad de su mandato”.
La conclusión es elemental: “Es decir, no cumple con el primer requisito que es el de ser militante; por lo tanto, la candidatura es endeble; luego, es público y notorio que estuvo participando simultáneamente en dos procesos internos: del PAN a la gubernatura y del MORENA a la alcaldía”.
Por ello, augura que PAN, PRI, PRD, y Conciencia Popular impugnarán dicha candidatura, la cual deberá ser resuelta por el Tribunal Electoral de San Luis Potosí.
Ya casi para finalizar, el analista zarandea a los consejeros electorales al decirles que ellos no están para hacer interpretaciones de la ley, sino para aplicarla: “Han forjado la idea de ser un tribunal que interpreta la ley; no es así, son consejeros electorales obligados a cumplir la ley”.
Luego, con ironía, redondea: “El único papel que cumplen a la precisión, es el de mediocres que buscan quedar bien con todos los actores, mientras le cuestan bastante al Estado”.