Después de pedir licencia como alcalde de la capital para enfocarse en su precampaña rumbo a la gubernatura de San Luis Potosí, Xavier Nava Palacios olvidó algunos detalles que resolver, como la inseguridad que aumenta día con día en la ciudad. Aunque no hay colonia en San Luis que se salve de la delincuencia, vecinos de los fraccionamientos Villa Saucito 1 y 2, Rinconadas, Sauzalito y División del Norte han levantado la voz para denunciar que la situación en esa zona de la capital ya es alarmante.
«La vigilancia de la Policía Municipal es nula, hace mucho que no vemos pasar alguna patrulla», comentó un vecino de uno de los fraccionamientos mencionados, el cual también dijo que las personas que salen de sus hogares desde temprana hora, son los principales objetivos de los delincuentes, «hay mucha gente que tiene que moverse a los paraderos de los camiones, y es en ese recorrido o en la propia parada del camión donde son despojados de sus pertenencias».
Ante esta desafortunada situación, los propios vecinos de la zona se han organizado a través de grupos de WhatsApp para alertarse entre ellos de robos que pudieran sufrir los transeúntes, automóviles o las casas-habitación. Según los habitantes de estos fraccionamientos, estas actividades delictivas incrementaron este año, a pesar de la contingencia sanitaria, por lo que existe cada vez más participación de la gente en las juntas vecinales.
Un caso en particular que despertó la irá de los vecinos fue cuando maleantes ingresaron a la capilla de San Juan Diego, la cual se encuentra en el Fraccionamiento Villa del Saucito 1, y en donde sustrajeron la caja de las limosnas, además de llevarse una campana de metal, causando, de esta manera, la indignación de los creyentes.
En este sentido, una de las actividades que han emprendido para sentirse más seguros en esa zona tan olvidada por las autoridades municipales, es la implementación de silbatos, los cuales usan para alertar de manera más inmediata a los vecinos en los casos que exista algún hecho delictivo. Sin embargo, la ayuda solo se da entre las propias personas, sin que la Policía Municipal intervenga, echando para abajo el logro que el titular de Seguridad Pública Municipal, Édgar Jiménez Arcadia, en pasadas ocasiones se ha colgado, asegurando que «su programa» está dando resultados.
