San Luis Potosí es un lugar lleno de cultura, y como prueba el Museo Nacional de la Máscara que es el hogar de algunas máscaras hechas de barro y que forman parte de su acervo, por lo que la Secretaría de Cultura de Gobierno del Estado invita al público en general a visitar este recinto y conocer sus diversas muestras del arte popular.
En la elaboración de máscaras de barro, por lo general se utiliza la técnica de modelado a mano, donde las piezas son construidas mediante el estirado de la pasta en rollos, placas o bolas de arcilla y se decoran con pintura, esmalte o bruñido. La pieza se deja al aire hasta que se seca. Las piezas que se encuentran así son muy quebradizas, por lo que deben ser manejadas cuidadosamente. Luego es llevada al horno, en donde pierde toda la humedad y adquiere una mayor resistencia y sonoridad. Puede ser que, con esta cocción, la pieza ya se dé por acabada o que aún requiera de horneados posteriores.
En la fabricación de máscaras de barro sobresalen algunas regiones de México como San Bartolo Coyotepec, Oaxaca por su barro negro; las piezas multicolores de Metepec, Estado de México, o las delicadas piezas de Tonalá y Tlaquepaque en Jalisco.