En días pasados, rumores de que algunas personas dejaban comida envenenada en los barrios de la capital potosina tomó fuerza cuando un perrito doméstico murió a causa de esto. Dueños del perrito piden ayuda a las autoridades para dar con los responsables, pues algunas versiones afirman que estos mataperros operan en varios barrios y colonias de la ciudad.
Según algunas versiones, el pasado 3 de marzo cuando un perrito llamado Ringo estaba siendo paseado por el Barrio de Tlaxcala, sin embargo, en medio del trayecto, el pequeño can comió una salchicha que se encontraba tirada en el piso. Momentos después comenzaron los síntomas del envenenamiento. Sus dueños lo llevaron lo más rápido posible al veterinario, pero ya era muy tarde. Ringo sufrió una muerte en extremo dolorosa por el veneno que le derritió sus órganos.
Dueños del perrito piden justicia en este caso, pues algunas versiones afirman que no es un caso aislado y que los delincuentes suelen recorrer las colonias dejando trozos de comida envenenada para acabar cruelmente con la vida de los canes y más animales que los comen.
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