Roy González Padilla, quien fuera asesor jurídico del Congreso del Estado, por imposición de la morenista Martie Hernández Correa, fue echado del edificio de Vallejo 200 por agredir a las diputadas Sonia Mendoza y Bety Benavente.
El 29 de noviembre de 2018 diputados panistas y priistas se unieron para pedir la renuncia de Roy González Padilla luego de que el entonces funcionario publicara en sus redes sociales “SÁQUENSE TODAS A LA FREGADA DE MI MURO, ÓRALE! A RAYARSE LAS NALGAS A OTRO LADO… JAJA”, esto como respuesta a una marcha feminista en las calles de San Luis Potosí.
En aquel momento Marite Hernández defendió a su recomendado y logró que el resto de la bancada la apoyara por lo que Roy logró quedarse en su puesto, sin embargo una agresión, que más bien fue burla, a Sonia Mendoza y Bety Benavente, le valió su expulsión definitiva del Poder Legislativo local.
Roy González Padilla ya había formado parte del grupo de asesores del Congreso del Estado, sin embargo al verse involucrado en chismes de lavadero, argüendes y demandas al Legislativo.
La LXII Legislatura se ha caracterizado por los escándalos. Desde las primeras semanas de que tomaron protesta los 27 diputados, se comprendió que trabajarían por su bien particular y no colectivo. Salvo contadas excepciones, los diputados lograron defraudar a sus votantes en tiempo récord.
Durante el primer periodo de sesiones, no presentaron ni una sola iniciativa a favor del pueblo, mucho menos aprobaron un cambio real a la vida de los potosinos. Si a caso el único mérito que han tenido fue hacer bloque e impedir el ofensivo aumento al agua del 40%, de ahí en fuera no hay nada.