La noche del 10 de noviembre, un grupo de personas que se identificó como militantes de Morena irrumpió violentamente en las instalaciones del Consejo Estatal Electoral y de Participación Ciudadana (CEEPAC), buscaban impedir la firma del convenio de coalición entre su partido, el Verde y el PT para participar de manera conjunta en las elecciones para gobernador de 2021, tema avalado por las dirigencias nacionales de dichos institutos políticos.
Eran cerca de las 9:00 de la noche. En redes sociales y grupos de WhatsApp había comenzado a circular la versión de que un hombre que se identificaba como delegado del CEN de Morena se encontraba en el CEEPAC, acompañado por representantes del Verde y del Partido del Trabajo para solicitar el registro de la coalición.
En cuestión de minutos, unas 50 personas se hicieron presentes con un objetivo muy claro; impedir a toda costa el registro. En un primer momento, los morenistas enfrentaron a los representantes del partido y cuando estaban a punto de entregar el convenio de coalición se los arrebataron en medio de una trifulca que obligó al personal del CEEPAC a resguardarse.
Temiendo que pudiera concretarse la coalición, los militantes de Morena hicieron guardia en el organismo electoral y en varias ocasiones irrumpieron en oficinas a donde se les negaba el acceso. Jalonearon, empujaron y agredieron verbalmente a los trabajadores de la institución que no hacían más que cumplir con su trabajo mientras intentaban aplicar las medidas sanitarias dada la pandemia de covid-19.
A los morenistas nada les importaba, no confiaban ni en sus propios representantes. Les hicieron leer una y otra vez el supuesto convenio que registraba la alianza Morena-PT y vigilaron hasta que se entregó, una vez recibido lo volvieron a leer. Celebraron el triunfo, un triunfo que no les constaba pues, tal como se confirmó minutos más tarde, para ese momento ya se había registrado la coalición con el Verde. Pasada la medianoche se retiraron, asegurando haber ganado.
El zafarrancho ni siquiera estuvo encabezado por los militantes de Morena aunque estos fueron usados como carne de cañón. Quienes movieron los hilos fueron los sicarios de Xavier Nava, liderados por Juan Antonio Rodríguez Chessani, y la tesorera del SITTGE ahora vestida de aspirante a la gubernatura por Morena, Francisca Reséndiz Lara, perfil claramente relacionado con el notario Eduardo Martínez Benavente, uno de los asesores principales del alcalde capitalino.
Al final, Morena registró dos coaliciones; una solamente con el PT y otra en la que, aparentemente, participan también el Partido Verde y Nueva Alianza. Con ello, deberá enfrentar a una coalición que se muestra casi invencible conformada por PRI-PAN-PRD-Conciencia Popular.
Es así como comienza este periodo electoral rumbo a los comicios que se celebrarán el próximo 6 de junio de 2021, con violencia y escándalos luego de que, apenas el pasado lunes, se firmó un pacto de civilidad entre los partidos y la militancia.
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